Midiendo estrategias de marketing automotriz
Crear e implementar estrategias digitales con resultados medibles para la industria automotriz es una tarea compleja, pero crucial para maximizar el ROI de tus esfuerzos de comunicación. La comprensión profunda de cómo los diferentes puntos de contacto influyen en la decisión de compra de un vehículo así como la clara comprensión de cuáles son las acciones de mayor valor en cada uno de estos puntos, puede significar la diferencia entre una campaña exitosa y una inversión desperdiciada. Aquí hablaremos de cómo desarrollar e implementar este tipo de estrategias para la industria automotriz. Arranquemos.
Comprender el recorrido del comprador automotriz
El primer paso para diseñar una estrategia de medición efectiva es entender el “consumer journey” del comprador en el contexto específico de la industria automotriz. Este camino puede ser notoriamente largo y complejo, con múltiples puntos de contacto digitales y físicos. Desde la investigación inicial en línea hasta las pruebas de manejo y las visitas al concesionario, cada interacción juega un papel crítico en la decisión final del comprador.
Definiendo acciones sobre el Funnel
Una vez detectados los puntos de contacto es importante definir las acciones de mayor valor en cada una de ellas. Saber distinguir en dónde debes privilegiar una interacción sobre una conversión es fundamental no sólo para decidir el tipo de esfuerzo que harás, sino más importante todavía, cómo lo medirás. Es importante tener en cuenta que mientras más informado llegue el usuario acerca de un modelo en específico, más efectiva será su navegación dentro de un sitio al buscar una conversión de valor, como una cotización o agendar una cita.
Implementación de herramientas y tecnologías
Poder medir este tipo de estrategias requiere de herramientas avanzadas de análisis y plataformas de gestión de datos. Soluciones como Google Analytics, Adobe Analytics, y herramientas especializadas en atribución, como Visual IQ o Convertro, pueden proporcionar los insights necesarios para entender cómo funciona cada esfuerzo y de qué modo contribuye al “journey” del cliente. La integración de estas herramientas con sistemas CRM y plataformas de gestión de relaciones con el cliente permite una visión 360 grados del comportamiento del consumidor.
Ejemplo práctico: Implementación en un concesionario
Consideremos el caso de un concesionario de automóviles que implementó un modelo de atribución multicanal. Al analizar sus datos, descubrieron que mientras los anuncios digitales impulsaban una significativa conciencia de marca, eran las reseñas online y el contenido en redes sociales lo que más influía en las decisiones finales de compra. Esto les permitió reasignar su presupuesto de marketing, invirtiendo más en la creación de contenido de calidad y gestionando activamente su reputación online, lo que resultó en un aumento del 20% en ventas directas atribuidas a estos canales.
Optimización continua
La implementación de una estrategia medible no es un proceso de una sola vez; requiere ajustes y optimización continua. Esto ayuda no sólo a la observación cotidiana sino a la creación de parámetros que pueden ayudar enormemente a notar los ciclos de consumo de una marca automotriz a lo largo del año y poder hacer los refuerzos necesarios para adaptarse a ellos.
En conclusión, la creación e implementación de una estrategia de marketing medible para la industria automotriz es un proceso complejo y de largo plazo, pero es posible. Las marcas de este ramo necesitan desmitificar los canales digitales y apostarle a una correcta medición de sus esfuerzos para poder transparentar cuáles son las acciones que generan mejores resultados. Es un camino con curvas, pero vale mucho la pena recorrerlo.